Este domingo se celebran los Oscar. La actriz española está nominada en la categoría de Mejor Actriz. Tras ser aplaudida en numerosos festivales de cine, ha sufrido la cancelación de la industria por unos polémicos tweets publicados hace años.
¡Cancelada! Así ha quedado Karla Sofía Gascón después de que salieran a la luz unos polémicos tweets que no han sentado bien entre una parte de la población que los ha catalogado como racistas, xenófobos e incluso clasistas. Ella ha hablado y ha negado haber escrito muchos de ellos.
Este hecho ha tenido lugar, además, en medio de las votaciones de los Premios Oscar 2025, en los que ya ha hecho historia al convertirse en la primera mujer trans en ser nominada como Mejor Actriz, y la segunda actriz de Alcobendas en ser nominada a los prestigiosos premios del Séptimo Arte.
Apoyo de parte de la industria
Algunos actores españoles han trasladado su apoyo a la intérprete, por lo que consideran un escarnio público desmesurado. A nivel internacional, Antonio Banderas e incluso la compañera de nominación de Gascón, Demi Moore, han demostrado un apoyo velado a la actriz española.
Otras figuras del cine como Macarena Gómez o Anabel Alonso; e incluso del panorama musical, como C. Tangana o Lola Índigo, reflexionaron sobre la cancelación durante su asistencia a la gala de los Premios Goya, en los que Karla Sofía fue la gran ausente; pues se ha retirado del foco tras toda esta polémica.
Apartada del foco mediático y borrada de la carrera por la estatuilla dorada
No ha hecho ninguna aparición pública desde que salieron a la luz los supuestos tweets. Sin embargo, hace pocos días varios medios confirmaban que Gascón sí irá a la gala de los Oscar citando a fuentes del entorno de la actriz. ‘Euronews’ se ha puesto en contacto con ella sin poder confirmar por el momento si realmente irá o no a la ceremonia.
Netflix, que ha producido la película por la que está nominada (‘Emilia Pérez’) parecía en un primer momento no estar dispuesto a asumir el coste del viaje, pero este lunes rectificaba, según ‘Variety’, por lo que finalmente sí pagarán el desplazamiento de Karla Sofía.
En medio de esta tormenta se ha generado un importante debate sobre la doble vara de medir en la industria del cine. ¿Se juzga de una manera más dura a Karla Sofía por ser mujer? ¿Se ha puesto el foco en sus opiniones como miembro del colectivo LGTBQ+? ¿Es justo que quien hace unos días ponía a la estrella en un pedestal por romper moldes, ahora la haya dejando completamente de lado ignorando su existencia?
La realidad es que el director de la película, Jacques Audiard, hizo unas declaraciones que no sentaron nada bien al público hispanohablante y ha seguido acudiendo a galas sin ser cancelado por sus declaraciones y opiniones. Además, su película ha sido muy criticada por parte de la audiencia al tratarse de una visión poco realista de México y por el español que usan los personajes, y que en opinión por parte del público es muy deficiente.

Cineastas con delitos penales ganadores de un Oscar
La Academia del Cine ha premiado con anterioridad a personas condenadas por delitos graves, incluso penales, teniendo conocimiento de los mismos. La opinión pública no ha cancelado a Roman Polanski.
Polanski admitió en 1977 que mantuvo relaciones sexuales de forma ilegal con una menor de edad. Pues bien, en 2003 recibió el Oscar a Mejor Director por su película ‘El Pianista’. No se le canceló entonces ni ahora, pero, la pregunta es si se debe separar la obra de la persona y por qué con Karla Sofía Gascón ha habido una respuesta tan feroz por unos tweets reprochables, pero que no dejan de ser la expresión de una opinión, incluso irónica, publicada de hace años.

En 1992, Mia Farrow, expareja de Woody Allen, lo acusó de abusar sexualmente de su hija adoptiva, Dylan Farrow, quien entonces tenía 7 años. La menor ha reiterado con posterioridad, incluso en 2014, que lo que su madre denunció es cierto y sufrió abusos. Hay que aclarar que Allen nunca fue condenado por estos hechos y la Justicia no encontró indicios de que tal abuso se hubiera producido.
El cineasta neoyorquino se casó posteriormente con su hijastra, también hija de Mia Farrow, Soon-Yi, comenzando la relación en 1991. Ella tenía 21 años y él 55, algo que muchos han considerado reprochable aunque no ilegal. A lo largo de su carrera ha recibido cuatro premios Oscar y 24 nominaciones.
¿Qué puede hacer Karla Sofía Gascón?
Casos como los mencionados hacen ver a muchos un doble rasero que parece cebarse con ciertas personas y una reacción desmesurada contra la actriz por los supuestos mensajes publicados hace años en sus redes sociales. ‘Euronews’ ha consultado con un abogado el marco legal de este caso y qué derechos colisionan, pues la libertad de expresión de Gascón, así como la de sus ‘haters’, chocan.
«Es un principio jurídico fundamental. La gente que crea que Karla Sofía Gascón ha actuado mal puede decirlo libremente, pero como todas las libertades, esta se limita cuando daña a otra persona«, dice en declaraciones a ‘Euronews’ el abogado Antonio Gómez de Olea.
Un caso «muy complicado»
En base a esto, ella «podría presentar una querella por calumnias si la han acusado de un delito de odio que no ha cometido, o también por injurias por el hecho de que la están desacreditando e insultando». No obstante, el abogado reconoce que sería un caso «muy complicado» porque la querella tendría que presentarse «sobre personas concretas y no de forma colectiva».
Respecto a los tweets falsos, no hay un encaje «en la usurpación del estado civil, que se recoge en el Artículo 401 del Código Penal«. Es decir, el delito no sería falsificar esos mensajes, sino lo que estos mismos expresan, en caso de que puedan incurrir en un delito de odio, por ejemplo, sin ser ella la responsable del mismo.
¿Se puede borrar su huella digital?
«Quien tiene la potestad de borrar mensajes o publicaciones en internet más allá del propio autor es un juez, que puede ordenar que se retiren ciertos mensajes en las redes sociales incluso como medida cautelar o como una decisión definitiva después de que se haya celebrado el juicio con sentencia firme», pero para ello Gascón tendría que denunciar individualmente a quien haya dañado su propio honor.
Gómez de Olea advierte en ‘Euronews’ de que ella también podría ser denunciada por esos tweets que han sido tachados de racistas, «pero habría que ver en qué momento se publicaron, ya que podrían haber prescrito y tampoco está claro que sean delictivos».
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Este caso destapa las grietas de una industria y una sociedad que aún luchan por encontrar un equilibrio entre la justicia, el perdón y el derecho a equivocarse. Mientras cineastas con sombras penales han sido aplaudidos y premiados, la actriz española enfrenta un linchamiento público por palabras que, ciertas o no, han desatado una furia desproporcionada en comparación con otros escándalos tolerados por la misma Academia de Cine.
Su histórica nominación al Oscar, que debería ser un símbolo de triunfo y apertura, se ve empañada cuando la obra se separa de la artista justo al conocerse los supuestos mensajes. Su presencia en la gala, si finalmente se confirma, sería un mensaje contra la doble moral y un recordatorio de que el talento, como el error, merece ser juzgado con la misma vara. Aún no sabemos cuál será el final de esta película.
Por Roberto Macedonio Vega & María Muñoz Morillo